Néstor Maschio nació en la ciudad de Concordia, pero su infancia en Puerto Yeruá lo impregnó de vivencias y de imágenes que guardó para siempre, y que con el paso del tiempo ha podido placenteramente recordar, y plasmar en su obra artística.
Seleccionamos algunos de sus poemas que vamos incluyendo a lo largo de este artículo.
“Almacén”, magnífica enumeración de personajes y objetos que conformaban ese mundo de negocios, de encuentros, de parada casi obligada, un espacio de desarrollo comercial y sociocultural, epicentro de varias localidades del área rural de nuestras provincias.
Docente en varias instituciones educativas, Néstor Maschio se ha desempeñado prácticamente en todos los cargos de las escuelas primarias, y ejerce hoy el rol de Supervisor.
Dedicado a las artes desde su niñez, cuando realizó cursos de cerámica, tango, folklore, entre otras disciplinas artísticas. Con el paso de los años, se fue convirtiendo en un genuino promotor de la cultura, participando en diversos grupos de desarrollo cultural, y gestionando proyectos que implican involucrar a la comunidad en su realidad socio-cultural. Ha recibido varios premios y reconocimientos por sus creaciones literarias.
Palabras de Néstor Maschio:
“Ahora no sé qué hacer, pero sé que en cualquier momento sale un bosquejo de pintura, escritura o teatro”.
Su libro “Caminos del Yeruá”, publicado en el año 2012, es una recopilación de poesías que se enmarcan en un tiempo y en un espacio puntuales; desfilan personajes, hábitos y costumbres, recuerdos que a muchos lectores nos transportan a nuestra niñez, a instantes mágicos de un tiempo imborrable. Bellísimas imágenes sensoriales, colores, aromas y sabores nos sorprenden en cada poema. “Una obra de puro sentir”, nos manifiesta su autor.
Nos cuenta Néstor que comienza a escribir a partir de una situación crítica a nivel personal, como muchas veces nos sucede, la angustia, el dolor, la incertidumbre, suelen ser grandes disparadores de una producción artística. “La palabra cura” nos expresa el poeta:
-La obra no es otra cosa que la cura al alma, después de haber hecho terapia simbólica y haberme dado de alta. Fue un brote emotivo-.
Y coincidimos con él en esto de no quedarnos detenidos ante el dolor, seguir, seguir produciendo. ¡Cuántas obras de arte nacieron en períodos de crisis en la historia de la humanidad!
La tapa del libro nos conduce a cualquier camino de campo, de esos que hemos recorrido quienes tuvimos la oportunidad de transitarlos, particularmente durante nuestra infancia, con esas peculiaridades que no pueden faltar, como la suavidad de la arena, la exuberancia de la vegetación, la intensidad del cielo, a pesar de que vagan por él algunas nubes; y allá a lo lejos, casi al final, algunas casitas, de las pocas que conforman un pequeño poblado. Una imagen que -nos dice Néstor- guarda el recuerdo que cada uno que caminó por allí sabe de qué se trata.
Néstor Maschio es docente, por lo que no podíamos dejar de hablar de la poesía en el aula. Nos manifiesta:
–La poesía al aula fue, es y será un gran recurso que brinda al alumno cierta musicalidad que resulta interesante. Cada contenido era desarrollado con el disparador de una poesía. Muchas veces con algunas palabras sugerentes armábamos con los niños poesías divertidas-.
Al conocer su obra tan prolífica, quisimos saber cuál es la preferida del autor, a lo que nos respondió que “La Escuela de las Ranas” le había parecido siempre la más significativa.
Néstor Maschio también es autor del libro “Calabacitas”, un trabajo de literatura infantil, llamado así en homenaje a la comunidad de Calabacilla y su región.
“Calabacitas”, una tapa que ilustra ese mágico mundo infantil que Néstor ha compartido durante muchos años desde su trayectoria docente y artística. Sus autores, Imanol Maschio, su hijo, y Luisiana Maschio, su sobrina.
Compartimos uno de sus exquisitos poemas, que fusiona lo lúdico, lo artístico y lo didáctico, “Para encontrar la ‘B’”.
Entre su vasta producción, este autor ha escrito monólogos, género que caracteriza de la siguiente manera:
-Los monólogos son manifestaciones que intentan ser graciosas sobre nuestros antepasados, costumbres, bailes, la infancia, las escuelas, las maestras con el paso del tiempo-.
Ha creado en este género diversos personajes, como una viejita que cuenta su historia; una maestra que habla del pasado y del presente de la educación, en crítica constructiva.
Uno de sus monólogos con mayor reconocimiento es el titulado “Así es la vida”, en el que pone de manifiesto el transcurrir del tiempo desde la llegada de los inmigrantes hasta el momento en que escribe la obra, con todo lo que cada etapa conlleva.
Cabe destacar que el Sr. Maschio, además de la producción de monólogos, los interpreta. Se ha presentado en escenarios de distintas ciudades de la región.
Elegimos, para finalizar esta presentación de la obra de Néstor Maschio, palabras de la Profesora Teresita Carrasco de Marfil, autora de una reseña biográfica que aparece en la obra “Caminos del Yeruá”.
“Como buen maestro cree en la sencillez de las palabras para el decir y escribir, cree en el estudio, el trabajo, la perseverancia y esencialmente cree en el amor y la pasión en todo lo que se hace por vocación”.
Luego de haber leído su obra poética, de haber investigado su trayectoria profesional, y de haber dialogado con él sobre aspectos relacionados con el arte, la cultura y la educación, podemos decir que coincidimos con las palabras de la Profesora Carrasco de Marfil. Néstor Maschio es un trabajador tenaz, que no detiene su andar, y cuando hace una pausa, como él mismo lo aclara, es el momento en que algo se está gestando, son “pausas de cultivo, luego vendrá la cosecha”.
Y no podemos dejar de mencionar que quienes lo conocen mejor, quienes han compartido con él el mundo laboral, destacan, además de su profesionalismo, sus actitudes humanas que lo convierten en una persona íntegra, comprometida con todo lo que diariamente emprende.
Agradecimientos: Al Sr. Néstor Maschio, por su atención y gentileza; y a la Sra. Claudina Esther Delfin, por el material compartido.
Texto y fotografías: Prof. Nélida Claudina Delfín.
Espectacular Néstor !!
Que hermosos recuerdos deja en cada poesia.
Que lindo tambien dialogar con personas sencillas con tanto talento.