Charla histórica de las Profesoras Rosa María Reisenweber y Graciela Guerrero

En el marco de la Semana de Mayo, en el día de un nuevo aniversario del Cabildo Abierto de 1810, la Subsecretaría de Educación y Cultura de la ciudad de Concordia organizó una charla histórica a cargo de las Profesoras Rosa María Reisenweber y Graciela Guerrero, “Entre Ríos en tiempos de la Revolución de Mayo”. Ambas docentes presentan una vasta trayectoria en las aulas de nivel secundario, y en diversas cátedras en institutos de formación docente. Han participado en charlas, conferencias, talleres, seminarios.
Ante una numerosa concurrencia hicieron las docentes un significativo recorrido por aquella época, que nos llevó a reflexionar en particular sobre la situación de nuestra provincia.

En primer lugar, la Profesora Graciela Guerrero realizó una minuciosa descripción de la realidad europea de finales del Siglo XVIII, con un cambio de pensamiento y el origen de la Ilustración, aquel movimiento intelectual renovador que incluyó todas las áreas de la cultura. Es fundamental este recorrido para entender los ideales de los hombres de la Revolución de Mayo. Y menciona tres nombres:
John Locke (1632-1704), filósofo inglés que defendía la idea de la separación de poderes y de los derechos naturales. Planteaba este pensador la idea de una monarquía moderada, con control parlamentario. Pudo observarse su influencia en los franceses Montesquieu y Jean Jacques Rosseau.
Montesquieu (1689-1755), autor de “El espíritu de las leyes”, admiraba la monarquía parlamentaria inglesa, y en su obra proponía la separación de los poderes del estado. Y Rosseau (1712-1778), autor de “El contrato social”, pensaba que la fuente del poder político era la voluntad general del pueblo. Es esta postura la base de la actual democracia.
Cada país tuvo su revolución. Inglaterra, la Industrial, relevante en el aspecto económico. Francia, la Revolución Francesa, relevante en el aspecto político-social.

En América se daban tres sucesos importantes: la Independencia de las colonias de Norteamérica en 1776; la Rebelión de Túpac Amaru, entre 1780 y 1782, que reclamaba los derechos de los aborígenes y pretendía poner fin a la explotación a la que eran sometidos; y la Revolución de Chuquisaca, en 1809.
En 1810 se disolvía en España la Junta Central de Sevilla por problemas políticos, y se conformaba un Consejo de Regencia, con solo cinco miembros. En este marco, surgían los nombres de tres patriotas con convicciones claras respecto de una Revolución: Manuel Belgrano, Juan José Castelli y Mariano Moreno.

Manuel Belgrano era hijo de un comerciante italiano, había nacido en 1770. Estudió en las universidades de Salamanca y Valladolid. Llegó a Europa durante la Revolución Francesa y allí se impregnó de las ideas de los filósofos de la Ilustración. Regresó en 1793 con el título de Abogado y el nombramiento de Secretario del Consulado, organismo colonial dedicado a fomentar y controlar las actividades económicas.

Juan José Castelli era primo de Manuel Belgrano, había nacido en 1774. Se recibió de abogado en la Universidad de Chuquisaca.

Mariano Moreno era hijo de Manuel Moreno y Argumosa, funcionario español. Había nacido en 1778. Cursó las carreras de Teología y Abogacía en la Universidad de Chuquisaca, en carácter de becado, debido a las escasas posibilidades económicas de su familia. Ávido lector, mientras residió en Chuquisaca se conectó con Matías Terrazas, un hombre sumamente culto que le facilitó el acceso a su biblioteca. Fue allí donde inició las lecturas de la obra de los pensadores franceses y quedó impactado con los discursos de Jean Jacques Rosseau.

Nos explicaba la Profesora Guerrero que una revolución no es espontánea; se planifica primero, para lo que se efectuaban reuniones. Nicolás Rodríguez Peña (1775-1853), activo participante de los sucesos de Mayo de 1810, prestaba su quinta para los encuentros; Hipólito Vieytes hacía lo mismo con su Jabonería.

Durante la Semana de Mayo, este grupo de patriotas presionó para la realización de un Cabildo Abierto. El tema trascendental era: ¿El rey se va, o se queda? Tras horas intensas de debate, se destituyó al Virrey Cisneros y la autoridad pasó al Cabildo. Continuó el debate hasta el día 25 en que se designó a los miembros de la Primera Junta de Gobierno, la que representaba a la sociedad.

Cornelio Saavedra y Miguel de Azcuénaga eran militares; Mariano Moreno, Juan José Paso y Juan José Castelli, abogados; Juan Larrea y Domingo Matheu, comerciantes españoles que adherían a la causa de la revolución; Manuel Alberti, sacerdote.
Mariano Moreno, responsable de un “plan de operaciones” de la Primera Junta, trató de difundir los ideales revolucionarios a través de La Gaceta, periódico por él fundado el 07 de junio de 1810. Y el día 27 de mayo mandó una circular a los gobiernos del interior, pidiéndoles que enviaran diputados para un Congreso que se reuniría en Buenos Aires para redactar una constitución y determinar la forma de gobierno.

La Profesora Rosa María Reisenweber disertó sobre la situación de Entre Ríos en aquellos años, el proceso de formación de nuestra identidad provincial, cuando la región histórica de Salto Grande comenzaba a ser conocida como “continente”, “provincia”, “partido”. “Entre Ríos” es una expresión que Tomás de Rocamora había utilizado cuando se dirigía al entonces Virrey Juan José de Vértiz. Fue este comisionado el encargado de la fundación de varias jurisdicciones que convivían. Y en 1783 fundó las Villas de Gualeguay, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú. Debido a que estos poblados tenían Cabildo Comunal, La Bajada, que espontáneamente había sido fundada en el siglo XVII, reclamó categoría de Villa para así tener su propio cabildo.

En definitiva, al día 27 de mayo de 1810, nuestra provincia contaba con tres Cabildos. El Cabildo de Concepción del Uruguay se pronunció el día 8 de junio, que designó como diputado al Presbítero José Bonifacio Redreuello, que defendía los derechos de Fernando VII, un contrarrevolucionario. El Cabildo de Gualeguaychú no eligió diputado y respondió el día 22 de junio que continuaba su apoyo a los realistas. Con respecto al Cabildo de Gualeguay no comunicaron en el momento indicado al vecindario y lo hicieron cuando ya estaban instalados los focos antirrevolucionarios.

Encontró Manuel Belgrano las muestras más leales a la Revolución de Mayo en La Bajada. Aquí la Profesora Reissenweber se detuvo en la figura de Gregoria Pérez de Denis, quien había nacido en Santa Fe en 1764, y a los 21 años contrajo matrimonio con Juan Ventura Denis, propietario de una estancia en Entre Ríos. Al morir su esposo, fue ella quien se hizo cargo de todo. Cuando el Gral. Belgrano se dirigía al Paraguay, Doña Gregoria Pérez le envió una misiva en la que le comunicaba que ponía a su disposición sus haciendas casas y criados, para auxiliar al Ejército. Belgrano le manifestó su infinita gratitud y la designó “Benemérita de la Patria”, como ejemplo de su patriotismo y de sus acciones consecuentes con ese sentimiento.

Gregoria Pérez falleció en Santa Fe en 1823. En su homenaje, fue encomendado al escultor Torcuato Tasso la construcción de una estatua, que recién en el año 1950 fue emplazada en la ciudad de Paraná. Calles y escuelas de distintas localidades de Entre Ríos fueron designadas con su nombre, en reconocimiento a la primera de las grandes Damas Patricias Argentinas.

Para la región de Salto Grande, la posibilidad de alinearse a los ideales de la Revolución de Mayo, llegó por medio de la adhesión a José Gervasio Artigas, “el Protector de la Liga de los Pueblos Libres”, quien defendió siempre los ideales de los hombres de Mayo de 1810.

Hasta aquí la impecable presentación de las Profesoras Rosa María Reisenweber y Graciela Guerrero, a través de un discurso caracterizado por la claridad en los contenidos y la convicción en cada expresión pronunciada. Un aplauso cerrado coronó la enriquecedora jornada que nos permitió revisar una porción sustancial de nuestra historia, esa historia que día a día los receptores entendemos que debemos conocer y analizar, para comprender nuestro presente, este tiempo, y el que vendrá.
Texto y selección de fotografías: Prof. Nélida Claudina Delfin
Felicitaciones!! Muy interesantes la charla de las profesoras.
Excelente!!