Categorías

3 de diciembre de 2024

revistaalmas.com

Lee desde otra perspectiva

“Cuando hay igualdad de oportunidades, las mujeres competimos sin diferencias”

Las pasiones se viven con intensidad y los sacrificios, aunque se sienten, son un condimento que hace que los logros sean aún más placenteros. Entrevistamos a Sofía Percara, una apasionada del automovilismo que nos contó parte de su historia y cómo conjuga su presente entre carreras y estudio.
Las pasiones se viven con intensidad y los sacrificios, aunque se sienten, son un condimento que hace que los logros sean aún más placenteros. Entrevistamos a Sofía Percara, una apasionada del automovilismo que nos contó parte de su historia y cómo conjuga su presente entre carreras y estudio.

Uno de los motores en cada una de estas carreras es su familia fierrera que la acompaña en forma incondicional, compuesta por sus padres, dos hermanos mayores y una hermana menor.

¿Heredaste el gusto por el automovilismo de alguien de la familia o es algo muy personal?

El gusto por el automovilismo lo heredamos mucho por mi viejo. Él toda la vida fue apasionado por las carreras y fue parte de una peña de Chajarí. El piloto era Rafael Dalprá que corría en la Fórmula Entrerriana. Todos desde muy chiquitos íbamos a las carreras como familia. Cuando mi hermano cumplió 8 le regalaron un karting. En ese momento empezó a correr él. Ahí empecé a meterme más. Un día surgió la posibilidad de probar el karting y desde ahí nunca me bajé. La familia acompaña mucho. Siempre pareciera que a mi viejo le apasiona más que a nosotros. A pesar de que siempre decimos que es más fácil que nos apasione algo que se podemos hacer; en el caso de él, desde abajo lo disfruta igual o más que nosotros.

Sofía y su padre, unidos por la misma pasión.

Alguna historia o anécdota de tus comienzos que no vas a olvidar nunca.

En mi primera carrera éramos tres, en la categoría Escuela. Como era un karting sin cambios, lo tenía con una relación más corta, entonces salía más rápido, después se hacía más lento. Ese día, en la largada, estábamos los tres parados en la misma línea, cuando salimos quedé primera, después obviamente me pasaron yo andaba más lento que los demás que tenían sus kartings con cambios. Pero bueno, nunca se olvida esa sensación de, en la largada, haber quedado primera.

La primera carrera, cuando aún era una niña.

¿Crees que para las mujeres es más complicado competir o es sólo una creencia?

No creo que para las mujeres sea más complicado competir. Nosotros, en el karting de Chajarí siempre tenemos muchísimas chicas en la escuelita. Cuando tienen la misma igualdad de oportunidades, están siempre peleando adelante. El problema es que cuando van creciendo, a los pilotos varones, por lo general, lo suelen apoyar más o incentivar más, o les dan más oportunidades en otras categorías, de correr más, con mejores herramientas y eso hace que se desarrollen diferente. Pero yo creo que es una cuestión de trabajo. Porque después, como deportistas, cuando están todos en igualdad de oportunidades, he visto que compiten sin diferencias. Las mujeres no somos ni mejores ni peores, tenemos la misma capacidad.

¿Es muy costoso participar en cada competencia?

Los costos se hacen muy complicados, más si uno quiere hacer las cosas bien, se hace muy difícil. Por eso digo que mi viejo es tan importante para nosotros porque es el que hace posible todo esto.

¿Qué les dirías a los chicos que quieren incursionar en el automovilismo y no tienen los recursos suficientes?

A los chicos que quieren incursionar en el automovilismo les diría que si no tenés los recursos, la verdad, es bastante complicado. Y si no tenés los contactos, más difícil todavía. Pero también es como todo. Si se trabaja y se le pone ganas se puede, y si no se puede como piloto, siempre hay posibilidad de ser parte del automovilismo como mecánico, como ingeniero o en otras funciones.

¿Tienes algún ritual o manía antes de cada carrera?

Soy muy rutinaria para muchas cosas, entonces para el karting para mí es lo mismo.  Preparo todas las cosas antes de salir, siempre de la misma forma. Cuando estoy por correr me visto siempre con el mismo orden, lo derecho antes que lo izquierdo, ponerme antes el buzo, después el casco, el cuello, por último, los guantes, siempre primero el derecho antes que el izquierdo. Son rituales, que no me cambian nada si los hago diferente pero son costumbres. Siempre me subo del lado derecho.

-¿Cuál fue tu carrera favorita y por qué?

Tengo varias carreras favoritas, pero no olvido la que gané en la 125 Internacional. Es la mejor categoría de karting de la provincia, y en ese momento había 30 pilotos corriendo. Me tocó largar 4ta. En la largada quedé segunda. En la primera vuelta quedé puntera y después me tuve que defender toda la carrera. Había mucho nivel en la categoría por eso creo que debe ser una de las mejores que gané.

La emoción del podio después de una carrera entre 30 buenos pilotos.

¿Cuál crees que es tu punto fuerte como piloto? ¿Y el débil?

Mi punto fuerte es la perseverancia, nunca me entrego y trato en lo posible de ser siempre constante en todo, nunca me rindo. Mi punto débil creo que es ser demasiado pensante. Si perdés una décima de segundo pensando, podés perder mucho, perder la oportunidad de hacer una maniobra, lo que sea. Y a veces, eso te juega en contra.

¿Algún piloto ídolo?

No tengo ningún ídolo. Miro y admiro muchas cosas de todos, pero ninguno es perfecto, entonces uno trata de elegir lo mejor de cada uno. Admiro mucho a mi hermano que está un escalón por encima, por la edad. Siempre lo seguí a él, porque me enseñó mucho y tenía una gran experiencia.

¿Cuál es tu sueño dentro de este deporte?

Un sueño es llegar al Turismo Carretera, pero es muy difícil. Entonces, lo que ya hemos logrado, estar en la Fórmula Metropolitana es algo increíble. No pienso mucho a futuro, trato de disfrutar y dar lo máximo ahora.

-¿Hubo algún momento en el que pensaste no seguir con esto?

Un momento en el que pensé si seguir o no, fue cuando tuve que venir a estudiar, no sabía cómo iban a ser las cosas. Por suerte mi viejo siempre me apoyó igual y tenemos la oportunidad de hacerlo, por más que yo esté en Santa Fe. Me exige más, pero lo doy todo.

¿Qué crees que pesa más (aparte de un buen equipo de mecánicos) el talento, el aprendizaje o la perseverancia?

El aprendizaje y la perseverancia son muy importantes. Aunque, la perseverancia sola no te sirve de nada, pero si vos sabés hacia dónde ir, sabés buscar gente que te enseñe y que te ayude a mejorar poder llegar muy lejos.  Mi viejo siempre nos apoyó muchísimo para ir a probar hasta que podamos mejorar, hasta que podamos entender. Al principio me costó, pero siempre estuve rodeada de gente que me ayudó y sumado a mi perseverancia pude crecer muchísimo. Sin dudas no creo que tenga solo talento, simplemente que trabajé mucho para llegar al nivel que tengo ahora.

-¿Qué estás estudiando? ¿Cómo combinas las actividades (estudio y práctica del deporte) para que todo salga lo mejor posible?

Estoy estudiando ingeniería mecánica en la UTN de Santa Fe. Unir el estudio y el deporte es complejo. Pero se hace posible porque tengo un gran grupo de amigos y de compañeros que me facilitan mucho las cosas cuando tengo que faltar, me explican lo que no entiendo, me ayudan. Después, cuando estoy en Santa Fe tengo que estudiar y meterme en temas por el tiempo que no estuve. Ellos estudian todo el fin de semana y yo no, entonces tengo que compensar el tiempo que no estuve. ES muy importante mi grupo y la gente que tengo alrededor que me ayuda y me hace todo más fácil. También este último tiempo recibí mucha buena onda de los profesores. Una vez tuve un parcial el mismo día de una carrera, y me lo cambiaron para otro día. Con suerte hasta en eso.

¿Cuál es el mejor consejo que le podrías dar a los pilotos que se inician?

En el automovilismo como en cualquier deporte se aspira a ganar, pero es mucho más difícil porque son 20 pilotos y solamente gana uno; es el que se va totalmente contento a la casa. Entonces creo que hay que perseverar y que no hay que entregarse. La mayoría de las veces te va a tocar perder, pero cuando ganás es un sentimiento increíble y una felicidad tan grande que cuando perdés, lo único que querés hacer es trabajar para volver a ganar. Entonces, el mejor consejo para los pilotos que se inician es que no se rindan, que trabajen mucho y se rodeen de gente que quiera lo mismo y que crean en ellos

Cuando en el camino acompaña un buen hermano, todo es más fácil.